TOMA, CHUPA!

Debería haber nacido en una burbuja, crecido en una cueva y estar ahora en una isla, completamente s o l a. Cuando querés estar absolutamente solo, cuando pensar es estar rodeado de cosas volando al rededor, cuando las sensaciones te van desde el cuello hasta el estomago, te llenan, te molestan, te suben y te bajan, ¿que hay que hacer?. Hay miles de cosas que quiero decir, que quiero que entiendan, que nadie lo va a hacer. Tengo una nube gris, muy gris, encima de la cabeza y necesito que venga un viento y la corra, y se vaya, y necesito que ese viento se quede para siempre, pero no tengo ese viento, no está ni a la vista. Y la nube la componen distintas nubecitas, que antes eran parte del cielo celeste, monótono y tranquilo que tenía, nubecitas que eran lo que antes me daba tranquilidad o diversión y que se convitieron en problemas, en cosas innecesarias, en una nube gris. Y a veces, cuando estoy con el paragüas abierto antes de que se largue a llover, un poco más tranquila pero no en paz, viene un viento bajo, fuerte y me lo da vuelta, dejandome indefenza bajo la lluvia de problemas que se veia venir, un viento bajo que antes era una cálida sonrisa que me abrigaba cuando venía el frio previo a la tormenta, un viento bajo e inesperado, y así estoy de vuelta, sin poder hacer más que soplar y querer que un viento más fuerte, y más alto, corra esa nube, para volver a estar bien, tranquila, celeste.

Bárbara Gé.